La Copa Perú tiene sus propios desafíos que vienen reconociéndose en cada
competencia programada, ya no resulta ser -de modo significativo- un espacio
formativo de nuevos jugadores locales, ahora hay una búsqueda de
pragmatismo triunfal con jugadores en su mayoría desconectados de vivencias y simpatías
locales, se tiene una hinchada desapasionada y que no encaja una completa identidad
y valoración del surgimiento de eficientes jugadores locales. Cada etapa se
inicia con renovaciones rápidas de otros jugadores, no existe innovación en los
sistemas tácticos y cualidades esenciales en cualquiera de los equipos, en logística
e infraestructura (sponsor, inversión privada, sostenibilidad del equipo)
existe bastantes diferencias. Ahora se juega con extraños e
irreconocibles que limitan el entusiasmo. El mercado de contratación de
jugadores, en su descarnado facilismo ha condicionado una definición
de capacidad y competitividad del futbol provinciano. Por eso que las ligas y
las Ligas de Fútbol hace rato que son solo descubridoras de amarres
administrativos y desazón para la implementación del ordenamiento renovador que
el futbol local necesita. Estas fechas implican una depuración objetiva y necesaria,
quedan algunos y se van otros; la critica busca generar opinión y mejoramiento
del estado de las cosas, los cuerpos directivos de cada club de seguro que
tienen entusiasmo y dificultad de inversión, ojala se produzcan cambios en el
desarrollo deportivo y que nuestro territorios tengan éxitos y asuman
el logro de sus desafíos y generen economías locales de bienestar.
La Copa Perú activa también compromisos, surge el apoyo local, y la hinchada se
cohesiona alrededor del triunfo o del posible triunfo, se forman seleccionados
casi interprovinciales, y se reconocen figuras locales que debieran tener
mejores oportunidades, el fútbol tiene este sino contradictorio, el sentido
popular dice que no hay lógica, que no se tiene lógica, lo lógico es que
cualquiera puede ganar, que genial y entretenida lógica. Con Deportes 10
acudimos al estadio, para el sufrimiento o para la intensa alegría, lógica de lógicos,
siempre cantaremos la victoria y siempre cantaremos al optimismo de nuestro
futbol local, avancemos...toda entrada se paga por favor.
MARIO
ALVA
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