viernes, 29 de octubre de 2010

CAPACITACIONES

Muchas veces desde esta columna hemos insistido en la necesidad de traer gente especializada en la enseñanza del futbol, gente capaz de mostrar a quienes dirigen de alguna forma los destinos del futbol provincial, los nuevos y más apropiados métodos de entrenamiento.
Hemos recomendado en un principio, y exigido más adelante, la constante capacitación para entrenadores y dirigentes.
Y cuando creíamos que por fin habíamos sido escuchados, nos damos con la sorpresa que se programó un Taller de Capacitación anunciando a personajes que nunca llegaron.
Es más quienes asistieron a esta capacitación dan cuenta de que los temas tratados iban encaminados al fútbol de mayores y no al de menores como habían anunciado.
Que pasó amigos organizadores, quizás quienes estuvieron a cargo de esta organización no estuvieron a la altura de las circunstancias o quizás no tienen la sufriente experiencia en cuanto a realizar este tipo de jornadas. De cualquier manera creemos que es un inicio, un primer paso hacia el objetivo principal que es hacer crecer el fútbol provincial.
Tuvimos la oportunidad de presenciar algunas horas, las ponencias de los profesionales invitados, y algo de razón tienen los asistentes a este evento cuando dicen que las charlas estuvieron encaminadas hacia el fútbol de competencia, y es que quienes dictaron este taller pertenecen al comando técnico de la Universidad San Marcos, equipo que participó en el torneo de Segunda Profesional, entendemos entonces que quienes se beneficiaron fueron aquellos que dirigen clubes que participan en las diversas ligas distritales, o aquellos que tienen una base de aprendizaje lo suficientemente eficaz como para poder aplicar lo mostrado a una realidad de menores.
Pero tomemos en cuenta esta experiencia para que en un futuro estas capacitaciones tengan un mejor provecho para los asistentes. Y es que son estos quienes forman la base del desarrollo futbolístico barranquino.
En este taller pudimos apreciar la asistencia de muchos técnicos a quienes de una u otra forma se les reconoce el trabajo que vienen haciendo, así como también se hizo notar de sobremanera la presencia de aquellos que creen, y seguirán creyendo, que todo lo saben, créanme que en algunos pasajes del certamen hasta se atrevieron a discutir con los ponentes, y hubo alguno que llegó a la desfachatez de hablar mal del ponente del día anterior, una tremenda cobardía, ya que lo que dijo, pudo haberlo dicho en su momento y no esperar a tenerlo ausente.
Como en todas las capacitaciones llegaron también aquellos que tienen por costumbre asistir a estos eventos esperando solamente la entrega de algún cartón que lo acredite como asistente, sin siquiera preocuparse en aprender algo, y andan prendidos del celular hablando durante toda la charla y saliéndose de la misma, sin mostrar respeto alguno por quienes están a su lado.
Hubo uno que pedía la palabra constantemente para mostrarle al resto su estúpida arrogancia de creerse un excelente profesional por que según él, estaba escribiendo un libro, y nos preguntamos que puede plasmar en un libro alguien que dicta clases de educación física sentado en la tribuna, leyendo periódicos mientras sus alumnos juegan "pelota" toda la clase o están pendientes de andar "gileando" con la compañera o compañero de aula. Por favor señores técnicos de la provincia, las capacitaciones no han sido programadas para el lucimiento de alguna estupidez personal, mucho menos para creernos mas que el ponente, ni "maletearlo" cuando está ausente; las capacitaciones son justamente para eso, para capacitarnos sobre una actividad sobre la cual estamos interesados o dependemos como fuente de trabajo, para recoger aprendizajes y traducirlas en enseñanzas para los jóvenes que están a nuestro cargo.
Y por otra parte están, aunque ausentes, justamente estos personajes, los que, en su obstinada creencia de que nadie les puede enseñar más de lo que saben, se ausentan porque aquella capacitación o aquel capacitador, no está a su nivel, y sin embargo aparecen como los que más exigen económicamente para dirigir a algún club provincial y pues ya vemos los resultados.
A los organizadores de estos eventos les decimos que sabemos de la existencia de personas que conocen mucho sobre capacitaciones y capacitadores. Pero a veces por envidias, rencores o antipatías, no somos capaces de pedir consejos sobre como hacer mejores y provechosas estas circunstancias. El hábito no hace al monje, entonces digamos que el simple hecho de ostentar un cargo no quiere decir que lo sabemos todo y que somos autosuficientes en lo que hacemos.
Por lo menos así lo veo yo.
Hasta la próxima...
YAMASAKI

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