domingo, 7 de noviembre de 2010

MAS QUE COMPLICADO


Complicadisima la situaciòn para el Juventud Barranco de Huacho, cuando a duras penas pudo derrotar a un peleador Atlètico Pucallpa por 2 a 1. Los injertos que hizo Daniel Ruiz tècnico huachano no respondieron como se esperaba, peor aùn cuando recièn el sàbado llegaron los refuerzos provenientes del Municipal.
Goyoneche nervioso, Mogollòn solo algunos minutos del primer tiempo y Caballero desaparecido, entonces no funcionaron estos refuerzos.
Por otro lado el Barranco viene demostrando en los ùltimos partidos demasiado temor para encarar con mayor volumen ofensivo. Decìa un jugador, que las indicaciones a los laterales principalmente, es que no se vayan demasiado. De local, el equipo huachano, tenìa que asegurar un marcador còmodo, pero las cosas asì, se tornan nubladas.
Barranco es cierto tenìa la pelota, pero en las ocasiones que llegò lo hacìa por el sector derecho por donde aparecìa Mogollòn, este que metiò hasta cuatro pelotas pasadas, pero siempre se perdìan, y eso demuestra al albur, con lo cual jugò el Barranco. Una vez que tomò poseciòn del terreno, el cuadro de la selva, fue fàcil para ellos controlar el medio sector, con un impecable trabajo pincipalmente del pequeño "Pulpin" Rojas. Es cierto, el ànimo creciò un poco a los 36 cuando Vila luego de recibir de Mogollòn, le devuelve la invitaciòn y lo deja con muchas posibilidades dentro del àrea, pero la falta es cobrada por el àrbitro, y luego el penal que se traducirìa en ventaja en los botines de Yances.
El 1 a 0 no durò mucho porque 5 minutos depuès el molestoso Oliveira, de un derechazo desde fuera del àrea mayor y ante la pasividad de los defensas, colocaba las cosasa iguales.
Para el segundo periodo, las cosas estarìan mas manejables para la visita, ya que con tranquilidad y en algunas en la contra ponìa en aprietos al Barranco. Asì a los 3 adicionales, una pelota que merodeaba la zaga del Pucallpa, es cabeceada por el ingresado Walter Sàenz y esta que se va hasta el fondo, y con ello la sentencia del compromiso.
Un triunfo que tranquilizò por un momento, pero que luego hizo pisar tierra, y asumir que la tarea es mas que complicada. Ojo, señor Ruiz, que no toda la vida acompaña la suerte; escuche tambièn a su preparador fìsico y a gente que le puede ayudar.

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